jueves, 17 de mayo de 2007

Personajes

DESDE HACE MUCHO TIEMPO Y HASTA QUE CONOCEROS A “VOSOTROS” ME IMPULSO A SEPARARME UN POCO DE “ELLOS”, MI VIDA LITERARIA GIRABA EN TORNO A SEIS PERSONAJES. SON PERSONAS REALES QUE EN ALGUN MOMENTO SE HAN CRUZADO POR MI CAMPO VISUAL Y POR UN DETALLE, POR UNA MANERA DE ACTUAR, HAN LLAMADO MI ATENCIÓN. ALGUNOS ESTÁN CREADOS DE UNA MEZCLA DE DOS PERSONAS REALES. SI LO PIENSO ES COMO TENER MÚLTIPLES PERSONALIDADES. ASÍ QUE SI ME LO PERMITÍS Y PARA NO SEGUIR SINTIÉNDOME CULPABLE POR ABANDONARLES, IRE CONTANDO ALGO SOBRE ELLOS. SUS HISTORIAS SON HISTORIAS INACABADAS, PORQUE LA VIDA, MIENTRAS SE VIVE ES ESO, UNA HISTORIA INACABADA.


“Viejo con Perro”

Desde hace tiempo Don Fernando baja a la calle ya solo una vez. Antes lo hacía dos: una, hacia las nueve de la mañana y otra, hacia las ocho de la tarde, con esa puntualidad rallante en lo absurdo. Paseaba durante treinta minutos a Flecha y volvía a subir a casa , para tirarse juntos, uno sobre el sillón de orejas y la otra justo a su lado, a sus pies.
Ahora solo baja una vez por la mañana al bulevar del Paseo de Recoletos. No es igual que el Retiro, pero hace ya tiempo que ni a Flecha ni a él les llama la atención la aventura de subir por la Calle de Alcalá.
Hace ya unos años que Don Fernando pasó de los ochenta, pero no ha perdido ni una pizca de esa mala baba que él califica de rectitud y los demás de soberbia. Nunca fue muy alto, pero con el tiempo ha ido empequeñeciendo aunque intente disimularlo con altanería, con esa marcialidad con la que pasea a Flecha, o con la que parado junto al césped espera paciente -aunque basculando del lado que el último derrame le dejó muerto- a que la perra huela sus propios orines y los de otros que pasean por allí.
Si le preguntas, Don Fernando te dirá que vive sólo, bueno con Flecha, pero no es así. En la misma casa aunque separados por un eterno pasillo, duerme Paca, “la chica”, una señora de más de sesenta años que le hace de madre, cocinera y enfermera.
Paca entró en la casa una tarde de junio de hace casi cuarenta años, de luto riguroso, recién llegada a Madrid de un pueblo de Badajoz, convencida de que después de enviudar aquel era su mejor destino. Y allí se quedó y allí seguía junto a Don Fernando a quien soportaba a duras penas, con la abnegación servil de quien no espera nada más.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

"con la abnegación servil de quien no espera nada más"

a veces se nos olvida la de gente diferente que hay

me encanta cómo lo has descrito
tíaaaa
siempre me dejas con ganas de más

un beso!

elnaveiras dijo...

La verdad es que parece inacabado, pero como comienzo de un relato o incluso una novela es genial.

Gloria dijo...

Ya alguna vez he dicho que las mejores historias son estas reales que se cuentan solas (claro, si se cuentan bien) Y lo de mezclar personajes ¡genial! Igual hay dos personas paseándose separadas y estaban condenadas (suena mal, condena) a estar juntas, je.

Anónimo dijo...

Una nota al margen de los personajes: no es que tenga sólo escrito esto sobre el personaje, llevo mucho tiempo con ellos, y cada vez que los veo (a las personas reales), añado un capítulo más a sus vidas. Pero creo que este no es el sitio adecuado para transcribiros, no una novela, sino seis. Creo que tal vez para mi lo interesante es saber cómo entran a formar parte del grupo, qué es lo que puede llamar la atención de alguien a quien no conoces.

Gsús Bonilla dijo...

....x mí si reescribes la colmena,
yo tan feliz.
eso sí, me interesa un monton tu punto de vista y sobre todo
tu manera de sentir a los que te rodean y a los que te rodeamos...

bsoles queen.

Anónimo dijo...

perdóname mamá
y en esto estamos de acuerdo las dos...
que SOY QUIEN MÁS TE HA LEÍDO
que te sé a ti y a tus personajes, porque cada día, como ellos, te levantas
"rigurosa puntualidad",
y luchas como ellos en esto que os ha tocado. camino a tu despacho, que son ya mucho años, has leído prensa, has oído a callas, has terminado demandas...
y has observado y has escrito
y tú me decías en el cole, que eso era escribir (mirar por ahi detenidamente).

fernando y flecha,
te dan las gracias.